Alberto Pizango reafirmó que no participará en una mesa de diálogo con la Presidencia del Consejo de Ministros y la Comisión Nacional de Pueblos Andinos y Amazónicos (Conap) porque esta última organización firma convenios con empresas petroleras, las mismas que se enfrentan a la lucha de los pueblos indígenas.
“Sentarnos con la Conapa significaría legitimar los propósitos que están buscando y eso sí entorpece el diálogo. Eso dijeron los pueblos y por eso se firmó el acta luego de la movilización de agosto pasado”, afirmó Pizango, quien, con documentos en la mano demostró que la PCM se había comprometido a que el diálogo sería sólo entre el gabinete y Aidesep, mas no con Conap.
Por su parte, Antonio Brack Egg, señaló a diferentes medios periodísticos que "AIDESEP una organización que quiere paralizar, no dialogar, que quiere incendiar la pradera, mientras la Conap quiere el diálogo pacífico sin desistir de sus derechos”.
Sin embargo, es importante recordar la pésima actuación que tuvo el titular del sector en las negociaciones de Saramiriza y Morona o en Madre de Dios con el Pueblo Harakmbut (Ver enlace http://www.servindi.org/archivo/2008/4361)
Finalmente nos queda señalar que la protesta indígena que se inicio el 9 de agosto, Día Internacional de los Pueblos Indígenas, consistió en ocupar pacificamente diversas instalaciones petroleras y gasiferas, impedir el tránsito fluvial o terrestre, entre las más destacadas. Ello facilmente es etiquetado como actos de violencia; sin embargo para otras personas concientes y conocedoras de la situación es una efectiva forma de ejercer derechos que no sólo afectan la propiedad sino la propia vida.
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